La reproduccion de estos textos y archivos de audio, para uso privado o publico, esta permitida, aunque solamente sin fines de lucro y citando la fuente: http://fraynelson.com/homilias.html.
Sobre las fechas y horas de publicación de estas oraciones mira aquí
Ten presente en tus intenciones de este día:
Haz click en los nombres para ver más información:
Uno de los abusos que más se extendieron durante la Edad Media, era la concesión de uno o varios beneficios eclesiásticos a los jóvenes y aún niños.
San Engelberto fue un ejemplo de ellos, cuyo padre era el poderoso Conde de Berg. Cuando estudiaba todavía en la Escuela de la Catedral de Colonia, era ya prebendado de Santa María de Aquisgrán, de San Jorge, de San Severino y de la Catedral.
En 1217 fue nombrado Arzobispo de Köln. La Diócesis estaba completamente arruinada por las luchas políticas y religiosas, pero San Engelberto poseía cualidades humanas que lo hacían apto para la tarea que le esperaba: un juicio claro, un gran deseo de justicia, una voluntad fuerte y una presencia que imponía respeto.
El Santo recibió generosamente a los frailes menores y dominicos, a quienes alentó para que se establecieran en sus dominios. Convocó varios Sínodos en su Diócesis, con el objetivo de mantener la disciplina en el clero secular y regular.
Se desempeñó con vigor y energía, sabiendo ganarse el respeto de todos. Pero al mismo tiempo, la mano firme y justa con que gobernó, le creó muchos enemigos.
Uno de ellos, fue su primo Federico de Isenberg, administrador de las religiosas de Essen, quien tramó una conspiración para asesinarlo debido a los reproches que San Engelberto le había dirigido, a causa de sus abusos y malos manejos administrativos.
El 7 de noviembre de 1225, el Santo partió de Söst a Schwelm con una escolta insuficiente. Federico y otros nobles cayeron sobre él con cien soldados y lo asesinaron.
Bogotá, Colombia - Señor te doy gracias por la vida de mi hijo German Alfonso, dale discernimiento para que descubra el maravilloso plan de vida que tienes trazado para el, bendice su vida dia a dia, amén.
Envigado, Colombia (1953) - Que Dios te bendiga querida esposa en este maravilloso día. Gracias por todos los años que has compartido conmigo y con nuestros hijos.
Houston, Tx, Estados Unidos (2010) - Felicidades por este día tan especial, a Dios por el milagro de la vida en tí; a tus padres Clara y Marvin que te esperaron con mucha emoción y ahora son felices porque estás tú. Dios te bendiga hoy y siempre. Olga Yanneth Buitrago.
Bogotá, Colombia (2010) - La Asociacion Benefica Cristiana Promotora de Desarrollo Integral ABC Prodein adscrita a la Unión Lumen Dei se permite invitar a todas las personas al día familiar donde habrá celebración eucarística, predicación y otras actividades, como artistas invitados estan Felipe Gómez y la agrupación Palo Santo. Valor de la entrada $10.000 pesos. Este evento se llevara a cabo en el Colegio La Inmaculada ubicado en la Carrera 7 con Calle 166, cerca del Hospital Simón Bolivar. Informes en el 2858002 o 2321692. Cordialmente invitados
Amad la justicia, los que regís la tierra, pensad correctamente del Señor y buscadlo con corazón entero. Lo encuentran los que no exigen pruebas, y se revela a los que no desconfían. Los razonamientos retorcidos alejan de Dios, y su poder, sometido a prueba, pone en evidencia a los necios. La sabiduría no entra en alma de mala ley ni habita en cuerpo deudor del pecado. El espíritu educador y santo rehúye la estratagema, levanta el campo ante los razonamientos sin sentido y se rinde ante el asalto de la injusticia. La sabiduría es un espíritu amigo de los hombres que no deja impune al deslenguado; Dios penetra sus entrañas, vigila puntualmente su corazón y escucha lo que dice su lengua. Porque el espíritu del Señor llena la tierra y, como da consistencia al universo, no ignora ningún sonido.
La sabiduría es un espíritu amigo de los hombres; el espíritu del Señor llena la tierra (Sabiduría 1,1-7)
Salmo
Señor, tú me sondeas y me conoces; / me conoces cuando me siento o me levanto, / de lejos penetras mis pensamientos; / distingues mi camino y mi descanso. R.
Todas mis sendas te son familiares. / No ha llegado la palabra a mi lengua, / y ya, Señor, te la sabes toda. / Me estrechas detrás y delante, / me cubres con tu palma. / Tanto saber me sobrepasa, / es sublime, y no lo abarco. R.
¿Adónde iré lejos de tu aliento, / adónde escaparé de tu mirada? / Si escalo el cielo, allí estás tú; / si me acuesto en el abismo, allí te encuentro. R.
Si vuelo hasta el margen de la aurora, / si emigro hasta el confín del mar, / allí me alcanzará tu izquierda, / me agarrará tu derecha. R.
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Es inevitable que sucedan escándalos; pero ¡ay del que los provoca! Al que escandaliza a uno de estos pequeños, más le valdría que le encajaran en el cuello una piedra de molino y lo arrojasen al mar. Tened cuidado. Si tu hermano te ofende, repréndelo; si se arrepiente, perdónalo; si te ofende siete veces en un día y siete veces vuelve a decirte: "Lo siento", lo perdonarás."
Los apóstoles le pidieron al Señor: "Auméntanos la fe." El Señor contestó: "Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esa morera: "Arráncate de raíz y plántate en el mar." Y os obedecería."
Si siete veces en un día vuelve a decirte: "Lo siento", lo perdonarás (Lucas 17, 1-6)
El camino de vida cristiana está en que mi pecado no sea obstáculo para otro, que perdone el mal del otro para que no sea obstáculo para mi, y que avance con fe hacia la plenitud en Cristo. 4 min. 37 seg.
La sabiduría no entra donde hay pecado por ello: si cuidamos nuestro cuerpo y nuestra boca, manteniendo limpio nuestro lenguaje, sabemos que vamos en su camino. 5 min. 57 seg.
El perdón cristiano no consiste en olvidar; es una manera de recordar, entendiendo la miseria que hay en quien me ofendió y mi miseria y que Dios es poderoso para sacar un bien de eso que sucedió. 3 min. 43 seg.
Haz una donación
para que esta obra continúe, y llegue a más personas! ¡La gloria sea para Dios!
1.1 La Biblia invita en muchos lugares a buscar la sabiduría; hoy, sin embargo, hace apremiante ese llamado para aquellos que tienen la posibilidad o la responsabilidad del gobierno.
1.2 Esto llama la atención porque fácilmente tenemos la idea de que un político es alguien que "ya sabe", y precisamente porque sabe, ha logrado subir, "escalar" hasta llegar al lugar que tiene. El lugar de mando, por tanto, es visto como un "logro" y como un "pago". La consecuencia es que, gobernar se vuelve un ejercicio de astucia (para ganar poder) y de codicia (para acrecentar el propio pago).
1.3 La primera lectura de hoy ve las cosas de muy diverso modo. El gobernante, a imagen del rey Salomón, debe ser ante todo y siempre un alumno, un discípulo de la eterna sabiduría. Según este otro esquema, gobernar no es escalar, sino ser elegido, invitado, ungido; gobernar no es disfrutar de un botín, sino recibir un llamado a la pureza de intención y a la lucidez de mente.
2. Perdonar y Creer
2.1 Así provenga sólo de los azares del proceso redaccional de Lucas, es muy ilustrativo en el evangelio de hoy la relación entre perdonar y creer. Uno como que puede decir, después de oír el texto de hoy, que perdonar es un ejercicio de fe, y que creer es el gran principio para llegara perdonar.
2.2 Y nada de ello suena descabellado: el que cree llega a conocer las dimensiones del perdón divino, y ello, solamente ello, le faculta para dejarse invadir de la fuerza maravillosa y restauradora del perdón que alcanza a los demás. Según esto, sin un crecimiento en la fe es imposible un verdadero avance en el perdón.
Nosotros, como colaboradores de Dios, os exhortamos a que no despreciéis el mensaje de la gracia de Dios. Porque Dios dice: Oí tu clamor en tiempo favorable;te socorrí en día propicio para salvarte.Y mirad, este es el tiempo favorable, el día propicio de vuestra salvación.
Procuramos comportarnos siempre de tal manera que nadie se escandalice por causa nuestra, y que nadie encuentre motivos para infamar nuestro ministerio. En todo cuanto hacemos, tratamos de manifestarnos como verdaderos ministros de Dios, soportando con toda paciencia tribulaciones, necesidades y angustias. Hemos sufrido azotes, cárceles y motines; hemos trabajado hasta el agotamiento y hemos pasado noches sin dormir y días sin comer. Nos hemos conducido con integridad, comprensión del evangelio y paciencia; hemos sido bondadosos, y con la ayuda del Espíritu Santo hemos demostrado nuestro sincero amor. Apoyados por el poder de Dios, nunca nos hemos apartado de la verdad; y armados de piedad y rectitud, hemos combatido a derecha e izquierda. Somos honrados, pero se nos ha deshonrado; tenemos buena fama, y se nos ha difamado; somos veraces, y se nos ha tachado de embusteros. Se nos ha tratado como a desconocidos, siendo bien conocidos; como a moribundos, estando vivos. Nos han golpeado, aunque no hasta la muerte; se nos tiene por tristes, pero estamos siempre gozosos; somos pobres, pero enriquecemos a muchos; no tenemos nada, pero lo poseemos todo.
«Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el viñador. Al sarmiento que no da fruto en mí, él lo arranca, y al que da fruto lo poda para que dé más fruto.
Ustedes ya están purificados por las palabras que les he dicho. Permanezcan en mí y yo en ustedes. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco ustedes, si no permanecen en mí. Yo soy la vid, ustedes los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante, porque sin mí nada pueden hacer. Al que no permanece en mí se le echa fuera, como al sarmiento, y se seca; luego lo recogen, lo arrojan al fuego y arde.
Si permanecen en mí y mis palabras permanecen en ustedes, pidan lo que quieran y se les concederá. La gloria de mi Padre consiste en que den mucho fruto y se manifiesten así como discípulos míos».
El que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante (Juan 15,1-8)
La vocación dominicana se funda en la oración porque desconectados de Dios no logramos nada, en el estudio como camino para que el Evangelio tenga poder sobre nosotros, en la vida comunitaria y en la evangelización. 5 min. 25 seg.
Haz una donación
para que esta obra continúe, y llegue a más personas! ¡La gloria sea para Dios!
1.1 Así como en la fiesta de Todos los Santos celebramos en cierto modo toda la santidad de Cristo, que florece en sus mejores discípulos, así puede decirse proporcionalmente que en esta fiesta de todos los santos de la Orden celebramos la hermosura y fecundidad del carisma que Dios otorgó a Santo Domingo de Guzmán.
1.2 En efecto, lo grande en hombres como Domingo, no es sólo que hayan sido santos ellos mismos sino que hayan tenido tanta capacidad para inspirar la alegría de la santidad, la belleza de la santidad en otros muchos. Y es que sin alegría y sin una experiencia de la belleza divina es imposible buscar en serio la perfección del Evangelio.
2. Una santidad llena de contrastes
2.1 Como en el caso de tantas familias nuestras, también en la familia de Domingo hay una gran variedad, no exenta de contrastes. Basta mencionar algunos nombres: Martín de Porres, el humilde portero, y Alberto Magno, el profesor de profesores en Colonia; el fuego impresionante de Catalina de Siena, y la serena contemplación de Tomás de Aquino; el ardor misionero de Jacinto de Polonia y el carácter místico de Juan Macías.
2.2 Semejante variedad indica algo más profundo: aunque nos cobija un mismo lema, la Verdad, sería muy peligroso creer que alguno de nosotros ya posee toda la verdad, al punto de poder despreciar o juzgar a los otros. Si la Verdad va de primera, ella debe ser ante todo la Maestra de todos, de modo que podamos reconocernos siempre discípulos de un mismo Cristo. Si todos nos reconocemos posesión suya y reino suyo, estaremos unidos; si alguno quiere reemplazarlo, vendrá la división.
2.3 Por lo demás, lo que nos une no son solamente recuerdos. Para quienes creemos en la comunión de los santos, las palabras de Domingo son algo más que poesía: "Os seré más útil desde el Cielo," nos dijo, y nosotros creemos que su intercesión eficaz y su don para consolar y animar a sus hermanos y hermanas no se han extinguido, sino que han alcanzado plenitud en la gloria del Cielo.