Esta es tu casa!

Respuestas a tus Preguntas

Pregunta publicada en 20210826:
Sobre el "talante" de Cristo

¿Cuál era el "talante" de Cristo? ¿Qué podríamos decir de su talante, para que fuera referencia para todos nosotros que le seguimos como sus discípulos? -- E.F.

* * *

Tu pregunta tiene una profundidad que puede resultar asombrosa: tu petición sobre el talante de Cristo. ¿Por qué?

Hay como tres razones principales:

Primera, porque uno suele mirar al talante de una persona para aplicarlo como modelo a una situación que uno está viviendo, pero resulta que muchas de las decisiones que afrontó Cristo no nos corresponden a nosotros directamente y mucho de lo nuestro no le corresponde a Él. Por poner un caso rápido y extremo; pensemos en la persona que tiene su matrimonio y entonces tiene que preguntarse hasta qué punto la suegra puede o no disponer cosas para evitar problemas con la esposa, es muy difícil aplicar ahí, qué haría Cristo o qué diría Cristo. Digamos que como frase bonita está bien pero es muy difícil de aplicar, entonces la primera dificultad que no encontramos es que es muy difícil trasladar a nuestra realidad lo que es la vida de Cristo y es muy difícil trasladarnos también a su realidad.

De hecho el pasaje que mencionas del capítulo segundo de San Pedro, habla de Cristo como modelo, pero lo plantea como modelo para una situación muy concreta que estaban viviendo los destinatarios de esa carta y era el trato justo, especialmente de aquellos que eran más humildes y que eran maltratados por sus amos, era un régimen de esclavitud, entonces les pone el ejemplo de como Cristo padeció, es un modo de argumentar un poco extraño para nosotros, pero bueno, eso es lo que tiene la carta de Pedro. Osea que plantear un modelo así como general de Cristo es difícil por las muy diversas situaciones que tenemos nosotros.

Otro ejemplo, una persona experimentando envidia en el trabajo es un poco difícil ver quien le tenía envidia en su trabajo específico a Cristo porque Cristo tenía un trabajo absolutamente único que era ser redentor de la humanidad. Tal vez alguien le podía tener envidia por su generosidad, su misericordia, su sabiduría, pero envidia laboral es muy difícil aplicarla a Cristo. Entonces este es un primer punto por el que esta petición tuya resulta compleja.

Lo segundo, por lo que resulta complejo es porque esa obra de imitar a Cristo, que por supuesto es algo que debemos hacer, no estoy diciendo que no lo debamos hacer. San Pablo dice: ?Sigan mi camino, o imítenme como yo imito a Cristo?, osea que si es algo que debemos que hacer, claro que si. Pero en ese imitar a Cristo, la obra interior la hace fundamentalmente el Espíritu Santo, es decir es el maestro interior, el que nos va recordando aquellas palabras, aquellas actitudes de Cristo según la situación en la que nos encontramos, fíjate que esto conecta con lo anterior, de manera que nosotros podemos tomar unas enseñanzas generales sobre nuestra fe cristiana que es básicamente lo tenemos en los mandamientos y a partir de ahí la imitación de Cristo es algo absolutamente personalizado que se da según la obra del Espíritu en cada persona y por consiguiente eso va cambiando bastante de una persona a otra. Entonces el que tiene una situación con la suegra o el que tiene un problema de envidia laboral es guiado por ese Espíritu Santo.

Dicho de otra manera, el modo como la Iglesia trata este tema del seguimiento de Cristo es que hay mandamientos y hay consejos; los mandamientos son mucho más objetivos, son externos, se estudian por ejemplo en el catecismo de la Iglesia Católica. Pero a partir de ahí la imitación de quien es Cristo no es algo que esté por fuera de nosotros no es algo que este así como una lección que pueda aprenderse, sino que es la obra interior del Espíritu la que nos va mostrando a través de lo que se suele llamar los consejos, cual es la mejor manera de acercarnos a Cristo en situaciones que Cristo no vivió, en situaciones que los Apóstoles no vivieron, en situaciones que muchos Santos no vivieron, es decir, en la absoluta unicidad , en la absoluta particularidad de mi vida, qué es lo que Dios quiere eso se responde no con una especie de explicación exterior, sino con la acción interior que únicamente da el Espíritu Santo, ese es un segundo motivo.

Y el tercer motivo es que muchas de las enseñanzas de Cristo, tienen como aparentes contradicciones de modo que es muy difícil llegar a un solo modo de obrar. Por ejemplo, Cristo dice: ?yo no he venido a abolir la ley? y luego San Pablo nos dice: ?La ley quedó abolida.? Entonces en el mismo Nuevo Testamento me voy a encontrar con esa tensión. Cristo dice: ?El que no junta conmigo desparrama?, pero también dice Cristo: ?El que no nos está atacando, está con nosotros.? Cristo dice: ?Pon la otra mejilla?, pero cuando a Él lo golpean entonces Él dice: ?Por qué me pegas.? Entonces es muy difícil sacar como una norma de comportamiento, sacar como un código de comportamiento a partir de los Evangelios porque nos vamos a encontrar con estas contradicciones, nos vamos a encontrar con estas como paradojas y entonces ahí queda muy difícil.

En gran resumen, la manera de acercarnos al comportamiento de Cristo es; primero, conocer los Evangelios, recibir la gracia del Evangelio, suplicar el don del Espíritu. Aprender los mandamientos, esa es nuestra referencia exterior y luego interiormente empezar a mirar cual es la acción del Espíritu Santo en cada uno de nosotros, por ahí va el camino.

Como te das cuenta tu pregunta es bien densa pero es muy bella y es una aclaración importante.


Reproducción permitida, citando la fuente.
-Fr. Nelson Medina, OP

Link permanente:
http://fraynelson.com/respuestas.php?fechapub=20210826