[Volver al inicio]

Suscribirse al Boletín diario "Alimento del Alma" -> Haz clic aquí :-)
MENU
PARA HOY:

Inicio
EVANGELIZACION BASICA - El ABC de tu Fe Cristiana
Hacer una donación
Lectura Espiritual
Laudes - Oración de la mañana
Vísperas - Oración de la tarde
Completas - Oración de la noche
Rosario de las Semanas
Homilía de hoy
Diario
Estamos en Youtube!
Estamos en Instagram!
Estamos en SoundCloud!
Estamos en Facebook!
Estamos en Twitter!
ESCUCHAR:

Homilía de hoy
Ultimas 15 Homilías
Conferencias en Spreaker
LEER:

Lecturas de la Misa de Hoy
La homilía de Hoy
Otras homilías
Boletines Anteriores
Alimento del Alma
Rosario de las Semanas
Imprenta (PDF)
Preguntas y Respuestas
Chiste de Hoy
VER:

Foto del Dia
Video del Dia
Canal en Youtube
CONOCER:

Padres Dominicos
Santuario Mariano Nacional
Quién es Fray Nelson Medina
PARTICIPAR:

Boletín Diario
¡Apoyar esta obra!
Wiki -
Transcripciones
Esta es tu casa!

Homilías de Fr. Nelson Medina, O.P.

Derechos Reservados © 1997-2024

La reproduccion de estos textos y archivos de audio, para uso privado o publico,
esta permitida, aunque solamente sin fines de lucro y citando la fuente:
http://fraynelson.com/homilias.html.

< Octubre 2020 >
 Dom  Lun  Mar  Mié  Jue  Vie  Sáb 
    
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
31
* El tiempo es de Dios *
[Volver al mes actual]

Martes, Octubre 20 de 2020

[Lectio Divina] [Laudes] [Vísperas] [Completas]

Sobre las fechas y horas de publicación de estas oraciones mira aquí

Ten presente en tus intenciones de este día:

Haz click en los nombres para ver más información:

San Pedro de Alcántara (santo)

Paula Isabel Merchan Montoya (cumple)

Daniel Santiago Merchan Montoya (cumple)

Nelson Rodriguez (cumple)

María José Rebasti Peralta (cumple)

Marta Becker (cumple)

Tiempo Ordinario, Año Par,
Semana No. 29, Martes


Lecturas del Día

Lectura:

Haz click en la referencia bíblica:

1a.

Cristo es nuestra paz; él hizo de los judíos y de los no judíos un solo pueblo (Efesios 2, 12-22)

Salmo

Dios anuncia la paz a su pueblo (Salmo 84 )

Evangelio

Dichosos aquéllos a quienes su señor, al llegar, encuentre en vela (Lucas 12, 35-38)


Homilías de viva voz

Núm.

Datos

Escuchar

Más...

1

1998/10/20


Cristo es nuestra paz.
20 min. 34 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

2

2012/10/23


Estar vigilantes es, entre otras cosas, no dejarnos adormecer por las seducciones de este mundo.
4 min. 52 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

3

2012/10/23


La esperanza cristiana no es puro deseo, no es pura hipótesis: es ejercicio de preparación para el retorno del Señor.
6 min. 55 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

4

2014/10/21


El cristiano es uno que permanece despierto mientras tantos se dejan adormecer por los ídolos y complicidades del mundo.
4 min. 49 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

5

2014/10/21


Que Cristo derriba muros de odio lo conoció Pablo en su propio experiencia y lo celebró en lo más hondo de su alma.
15 min. 16 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

6

2018/10/23


El camino por el cual Cristo ha traído la paz pasa por el conocimiento profundo de mi miseria, el arrepentimiento y por la dulce aceptación de su amor redentor en la cruz.
5 min. 18 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

7

2020/10/20


Cuidado con el cansancio, el aburrimiento y la tristeza espiritual porque pueden hacer que tu esperanza se vaya al mínimo llevándote a que te pierdas la visita del amor y la gracia de Dios.
6 min. 43 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

8

2020/10/20


Sólo la Cruz de Cristo derribó el muro de odio es decir de arrogancia dureza y desprecio que separaba a unos pueblos de otros y unas personas de otras. Solo en su Cruz nace la fraternidad.
15 min. 24 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

9

2020/10/20


Los judíos tenían la riqueza de la revelación pero la pobreza de su arrogancia y egoísmo; los no judíos tenían la riqueza de su hambre de Dios pero la pobreza de una vida a menudo viciosa. De unos y otros, Cristo ha creado un hombre nuevo, que reúne la riqueza de los judíos y de los no judíos.
11 min. 1 seg.

Link permanente a esta homilía Click derecho para grabar en versión MP3 Click normal para ir a la transcripción Publícalo en Facebook! Cuéntalo en Twitter!

Haz una donación
para que esta obra continúe, y llegue a más personas! ¡La gloria sea para Dios!


Homilías escritas

Versión

Homilía para leer:

1

1. El Precio de la Paz

1.1 En nuestro tiempo, los embates del terrorismo y de otras formas de violencia acrecientan un anhelo que es muy caro al corazón humano, el anhelo de la paz. La paz se ha convertido en moneda de todos los bolsillos y palabra que todos repiten. Pero la primera lectura de hoy nos recuerda que la paz verdadera tiene un precio.

1.2 En el mundo antiguo, allá en el siglo I, los judíos y los no judíos (esto es, los llamados "gentiles") se despreciaban mutuamente, llegando en algunas ocasiones a la segregación o el odio. Las razones suenan extrañas a nuestros oídos: los judíos veían con desaprobación y repugnancia las costumbres libertinas de los paganos, y estos veían con extrañeza y suspicacia las costumbres particulares del pueblo de Abraham y de Moisés. Por eso Pablo habló de un "muro" que separaba a "los dos pueblos." Ahora, sin embargo, el mismo apóstol dice que el muro ha sido derribado y que el que lo ha logrado, el que ha vencido al odio y traído la paz, se llama Jesucristo. Pero ello tuvo un precio.

1.3 El precio de la paz fue el sacrificio de Cristo. Pablo lo describe gráficamente diciendo que Cristo derribó el muro "con su carne." Derribar un muro con la propia carne es destrozar la propia carne, y eso es exactamente lo que ha hecho Nuestro Señor. El lugar de la paz no es la mesa de negociación entre intereses humanos sino la mesa del altar y del sacrificio. No se alcanza la paz mirándonos unos a otros sino mirando juntos hacia la Cruz que denuncia todas nuestras miserias y también las sana.

2. Vivir Vigilantes

2.1 En el evangelio de hoy, por otra parte, Cristo llama a sus discípulos a la vigilancia, como criados que esperan que vuelva su señor. Es un tema que vemos aparecer con alguna frecuencia en los Evangelios, más aún cuando el final de la vida misma del Señor se aproximaba. En esta ocasión el llamado a vigilar va acompañado de promesas de bendición y felicidad: "Dichosos los criados a quienes el señor, al llegar, los encuentre en vela." Sabemos bien que un destino muy distinto aguarda a los que no estén en vela, pero por hoy es más importante gozarnos de los bienes que están reservados para los que vigilen.

2.2 Cristo describe estos bienes de un modo sencillo pero que sin embargo queda algo velado a nosotros; dice: "el señor se ceñirá, los hará sentar a la mesa y los irá sirviendo." Es interesante comparar esta afable promesa con la manera como Cristo ve que nosotros solemos obrar: "¿Quién de vosotros tiene un siervo arando o pastoreando ovejas, y cuando regresa del campo, le dice: Ven enseguida y siéntate a comer? ¿No le dirá más bien: Prepárame algo para cenar, y vístete adecuadamente, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después comerás y beberás tú? ¿Acaso le da las gracias al siervo porque hizo lo que se le ordenó?" (Lc 17,7-9)

2.3 Lo que se anuncia a los que estén en vela es que serán servidos por su señor: algo que, según la comparación que aquí proponemos, no sucede nunca en esta tierra. Esperar el retorno del Señor es entonces esperar el momento en que ya no seremos siervos, sino amigos (Jn 15,15); es también esperar la hora en que "reinaremos con él" (2 Tim, 2,12) y ese día sin término en que se cumpla lo que por ahora es anuncio: "Ellos verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. Y ya no habrá más noche, y no tendrán necesidad de luz de lámpara ni de luz del sol, porque el Señor Dios los iluminará, y reinarán por los siglos de los siglos." (Ap 22,4-5).


[volver arriba]


[Volver a la versión anterior] [Buscar otra Homilía]

-Fr. Nelson Medina, OP

Google Groups
Suscríbete gratis a mi Boletín de Evangelización Católica
Email:


LO ÚLTIMO:

LA GRACIA - Homilías
LA GRACIA - Homilías
Evangelio del Día en 3 lenguas
Evangelio del Día en 3 lenguas
¡Vamos a Orar!
¡Vamos a Orar!
Exégesis Simple
Exégesis Simple
Con Mente Honesta
Honesta-Mente
Preguntas y Respuestas
Fray Nelson te responde