LA GRACIA 2020/12/20 Dios cumple sus promesas
CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO B Este Mesías que va a nacer, Jesús, a quien aguardamos con tanta expectativa, es la expresión misma del amor incalculable de Dios y de su fidelidad sin grietas.
CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO B Este Mesías que va a nacer, Jesús, a quien aguardamos con tanta expectativa, es la expresión misma del amor incalculable de Dios y de su fidelidad sin grietas.
El amor de Dios echa afuera el temor, te sostiene, te levanta y te bendice; el amor de Dios te da verdadera vida. Volvamos al Evangelio que nos fundamenta y nos salva.
El amor de Dios es alianza y es transformante; no es superficial, ni es simplemente una caja de respuestas a tus necesidades o caprichos.
Por amor Dios como Creador nos da libertad, como Redentor nos atrae y como Santificador acompaña nuestra decisión por el bien. En esta Cuaresma respondámosle con amor.
Dios es amor, amor manifestado en el sacrificio del calvario y actualmente en el santo sacrificio de la Eucaristía.
Jesucristo nos busca en las profundidades de nuestra miseria para salvarnos. ¡Hasta allí llega Él, de tal forma hemos sido amados!
Dios me ama no porque saque alguna utilidad de mi sino porque Él es Amor. El Señor me ama con amor de gratuidad, con amor de gracia.
Que Dios en esta Semana Santa nos conceda amor agradecido, amor del que no se mide y a la vez que nos conceda gran humildad para no olvidar lo que somos y quién es Él.
DOMINGO V DE CUARESMA, CICLO C El ideal de perfección lo puso Dios en nuestro corazón pero solo con nuestras fuerzas no se alcanza. Cristo lo alcanza para nosotros dándonos su amor y abriendo el camino de la fe.
La raíz de nuestra dificultad para perdonar está en que llevamos “cuentas” y el único modo de superar ese mal hábito sucede cuando somos inundados por el amor y el poder de Dios.
Dios siempre está dispuesto a volver a empezar con la humanidad. Miremos su infinita condescendencia que se abaja y que una y otra vez nos sigue buscando.
De Dios podemos recibir dos tipos de bienes: de naturaleza y de gracia. El amor natural se funda en la comunicación de los bienes naturales concedidos por Dios, y en virtud de ese amor, el hombre, en su naturaleza íntegra, ama no sólo a Dios sobre todas las cosas y más que a sí mismo, y lo mismo hace cualquier otra criatura con el amor que le es propio, sea… Leer más »¿Es lógico decir que hay que amar a Dios más que a sí mismo?
DOMINGO XXXI DEL TIEMPO ORDINARIO, CICLO B Aprendamos de la Sagrada Escritura que nos enseña que el verdadero amor significa preferir a Dios sobre todo, obrar y preservar el bien en toda persona.
Como ya hemos expuesto (a.2), el temor de Dios es doble: el filial, con que se teme su ofensa o su separación, y el servil, con que se teme la pena. Ahora bien, el temor filial debe crecer al aumentar la caridad, como aumenta el efecto al aumentar la causa. En realidad, cuanto más se ama a otro, tanto más se teme ofenderle y apartarse de él. El temor servil,… Leer más »¿El temor de Dios disminuye al aumentar el amor hacia Dios?
¿Qué es lo de no juzgar? ¿Significa que uno nunca debe pronunciarse sobre las acciones de otras personas?
DOMINGO VI DE PASCUA, CICLO B Cristo quiere que comprendamos que el amor no está lejos de la obediencia porque lo que busca es lo mejor para la persona amada.