LA GRACIA 2020/12/13 Vivir en gozo porque hay esperanza
TERCER DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO B Estamos viviendo el Adviento con fuerza, esperanza y alegría porque nos damos cuenta que nuestro recorrido tiene sentido, que Nuestro Señor viene en camino.
TERCER DOMINGO DE ADVIENTO, CICLO B Estamos viviendo el Adviento con fuerza, esperanza y alegría porque nos damos cuenta que nuestro recorrido tiene sentido, que Nuestro Señor viene en camino.
No solo hay que tener la alegría cuando surge el bien, también hay que tener alegría cuando fallan los planes del malvado, cuando se destruye lo que nos destruye a todos, cuando se arruina lo que quería arruinarnos a todos.
Reza seguro con el Salmista: “¡Señor, Tú eres mi refugio y mi fortaleza, confío en Ti!” Te garantizo que El te preservará de las insidias del “demonio meridiano” -en las tentaciones y… ¡en las caídas!-, cuando la edad y las virtudes tendrían que ser maduras, cuando deberías saber de memoria que sólo El es la Fortaleza. ¿Tú piensas que en la vida se agradece un servicio prestado de mala gana?… Leer más »Dos palabras para ponerte en movimiento
Quien se une plenamente con Jesús sabe lo que es ser hijo de Dios y encuentra la alegría completa.
La alegría que trae Cristo nadie la puede entender ni detener, pero produce y multiplica conversiones.
Cuando tu dar es abundante mayor es tu alegría y si comunicas el don de la fe y la gracia esa alegría no se compara con nada.
En cuanto tengas a alguno a tu lado -sea quien sea-, busca el modo, sin hacer cosas raras, de contagiarle tu alegría de ser y de vivir como hijo de Dios. Fomenta tu espíritu de mortificación en los detalles de caridad, con afán de hacer amable a todos el camino de santidad en medio del mundo: una sonrisa puede ser, a veces, la mejor muestra del espíritu de penitencia. Que… Leer más »Alegría, caridad, mortificación, humildad
La virtud, como hemos expuesto (1-2 q.55 a.2), es un hábito operativo; de ahí que, por su esencia, tiene inclinación al acto. Ahora bien, sucede que un mismo hábito es el origen de muchos actos ordenados de la misma especie, subordinados unos a otros. Y dado que los actos posteriores no proceden del hábito de la virtud sino en función del acto primero, la virtud no se define ni se… Leer más »¿Gozarse puede ser una virtud?
La alegría de Cristo es que el plan de Dios se realice: las personas reciben conversión por la fuerza del Evangelio y conocen al Padre dándole gloria.
La caridad, según hemos expuesto (a.1 ad 3), produce en nosotros un doble gozo. Uno principal, que es el propio de la caridad, con el que gozamos del bien divino considerado en sí mismo. Este gozo de la caridad no tolera mezcla de tristeza, así como tampoco puede tolerar mezcla de mal el bien de que se goza. En este sentido se expresa el Apóstol en Flp 4,4: Gozaos siempre… Leer más »¿Puede haber mezcla de tristeza con el gozo propio de la caridad?
Los cristianos tenemos muchas razones para la alegría. La liturgia del Adviento nos las recuerda una y otra vez, ante el peligro de que los agobios de nuestra vida nos impidan disfrutar de ellas: “(…) cuando salimos animosos al encuentro de tu Hijo, no permitas que lo impidan los afanes de este mundo” (Oración colecta, Domingo II de Adviento), “(…) concédenos llegar a la Navidad -fiesta de gozo y salvación-… Leer más »Una reflexión de Mons. Munilla sobre el adviento y la alegría
La etapa última, conventual
En 1595, fray Antonio de Ortiz, después de tratar el tema con los frailes del virreinato y recabada la autorización precisa, estimó llegado el tiempo de introducir en toda la provincia peruana la recolección, como estilo franciscano de vida comunitaria. Era, pues, por muchas razones urgente que «en este distrito y comarca de esta Ciudad de los Reyes se fundase un convento de nuestra orden de recolección, para gloria de Dios y consuelo espiritual de los religiosos que de esta provincia se quisiesen ir a morar allí, viviendo en más estrecha observancia y recogimiento, como en otras casas semejantes en nuestra Orden se vive, con mucho provecho de las almas de dichos religiosos y con grande edificación de los fieles».
“Las claves de la constitución apostólica Veritatis gaudium aparecen desde su primer párrafo. La renovación de los estudios eclesiásticos se sitúa en el horizonte de la experiencia de alegría que significa conocer y transmitir la Verdad en persona, Jesucristo el Hijo de Dios. Quien se ha encontrado personalmente con Jesús de Nazaret y su Buena Nueva reconoce un síntoma inconfundible: le invade una alegría antes desconocida y, sin embargo, familiar,… Leer más »Cuando la verdad alegra
Recordar las maravillas del Señor; ver las obras que está haciendo en nuestro tiempo; experimentar su presencia y su bendición en la propia vida; proclamar su grandeza y su bondad.
DOMINGO XVII DEL TIEMPO ORDINARIO , CICLO A Renunciar a los ídolos y declarar que Cristo es nuestro único Dios, que sólo por Él somos salvos trae verdadera alegría y transformación. [REPRODUCCIÓN PERMITIDA – Ayúdanos a divulgar este archivo de audio en las redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios.]
Llegar a la alegría plena es reconocer que Dios me ha llamado y enviado, y Él mismo es quien me acompaña en el camino de mi vida cristiana. [REPRODUCCIÓN PERMITIDA – Ayúdanos a divulgar este archivo de audio en las redes sociales, blogs, emisoras de radio, y otros medios.]