Plenitud de mujer en Dios

La Biblia presenta Los dones propios de la mujer, en su cuerpo y en su alma, a través del ejemplo de personas concretas, como la reina Esther, que con su fuerza de intercesión salvo a todo el pueblo.

LA GRACIA del Jueves 17 de Agosto de 2017

El verdadero amor cristiano es el que está preocupado y ocupado de manera consistente en buscar el bien de nuestro prójimo corrigiendo y perdonando.

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ROSARIO de las Semanas 20170815

#RosarioFrayNelson para el Martes:
Contemplamos los Misterios de la Antigua Alianza

Usamos esta versión de las oraciones.

  1. En el primer misterio de la Antigua Alianza contemplamos la paciencia de Dios, que no detuvo su amor ante el pecado de los hombres.
  2. En el segundo misterio de la Antigua Alianza contemplamos el camino de fe de Abraham.
  3. En el tercer misterio de la Antigua Alianza contemplamos el éxodo de la tierra de Egipto.
  4. En el cuarto misterio de la Antigua Alianza contemplamos el don de la Ley hecho a Moisés y a su pueblo junto al Monte Sinaí.
  5. En el quinto misterio de la Antigua Alianza contemplamos la gran promesa de Dios al rey David: que el cetro real no se apartaría de su descendencia.
  6. En el sexto misterio de la Antigua Alianza contemplamos la valiente vocación de los profetas, por quienes el Espíritu Santo nos habló de muchas maneras.
  7. En el séptimo misterio de la Antigua Alianza contemplamos a el pequeño resto de Israel, que permaneció fiel y fue semilla de la Nueva y Eterna Alianza.

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¿Ascensión o asunción?

Fray Nelson le saludo con aprecio. Me puede esclarecer una duda? Diferencia entre ascensión y asuncion. Gracias. –JJ

* * *

Ascensión, viene del verbo ascender, y en nuestra fe católica se aplica ante todo al misterio de Jesucristo resucitado que “asciende” a la gloria del Padre. Como ya lo sugiere el verbo, Cristo asciende por su propio poder, en el sentido de que, siendo verdadero Dios como el Padre, su gloria es la misma del Padre, y a ella asciende, una vez concluida su misión redentora en esta tierra.

Asunción, en cambio, viene del verbo asumir. El acto de asumir es una “asunción.” Asumir significa: atraer hacia sí y hacer suyo algo. Por ejemplo, si una persona dice: “Yo asumo que (tal o cual cosa)…” lo que está diciendo es: “Yo tomo esa idea y la hago parte de mi razonamiento o discurso…”

Cuando en nuestra fe católica hablamos del misterio de la asunción estamos refiriéndonos en particular a que la Santísima Virgen María fue “asumida” o sea: recibida, acogida.. ¿por quién, y en dónde? Recibida y acogida por Dios mismo, en la gloria del Cielo.

Se ve entonces que el verbo asumir, y el sustantivo asunción indican que es una acción que se RECIBE mientras que la Ascensión es una acción que se HACE.

Cristo asciende, por su propio poder y gloria; María Santísima es “asunta” o “asumida” a la gloria del Cielo por el amor del Padre, y el Hijo y el Espíritu Santo.