LECTIO 20160825

LECTURA ESPIRITUAL.

#LectioFrayNelson para el Jueves XXI del Tiempo Ordinario

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Una vida marcada por la Pascua, 04 de 12: El endurecimiento del Faraón

4. Sobre el “endurecimiento” del Faraón:

(1) Contexto: estamos en un mundo politeísta que al contrario de la religión cristiana, el hombre no es imagen y semejanza de Dios. En estas religiones politeístas (la egipcia incluida), los dioses son imagen y semejanza del hombre.

(2) ¿Cómo se ve un choque o conflicto? En una primera aproximación parece que el Éxodo fuera conflicto de dioses: Faraón se va a enfrentar a Yahvé. Pero Dios le hace ver a Moisés que en realidad no hay tal colisión porque no hay varios dioses: sólo existe un Dios, que es Él. Todo lo que pase está finalmente dentro de su plan, que ciertamente incluye la rebeldía voluntaria de Faraón o de quien sea. Todo está en el plan de Dios. Detrás de la dureza del Faraón está Dios en el sentido de que las amenazas o decisiones del Faraón no pueden tomar por sorpresa a Dios. No tiene Moisés por qué alarmarse ni preocuparse tanto.

(3) Cuando hoy en día vemos los escándalos y las desacralizaciones hemos de aplicar esta misma idea y darnos cuenta que Dios ya lo sabía aunque no lo hubiese deseado del modo como sucedió. Al final, sin embargo, en el conjunto de lo que llega a suceder, es su voluntad la que brilla, como en el caso del Éxodo.

(4) Por dar otro ejemplo: Jeremías tuvo que presenciar episodios muy tristes que fueron ya predichos por él a los judíos. El profeta no quiere decir que Dios esté de acuerdo con el acto rebelde así como ha sucedido: simplemente quiere hacerles ver que todo está en el presupuesto de Dios. Todo eso sucederá para purificación del Pueblo.

* La muerte de los primogénitos.

(1) Ex. 4: Israel es mi primogénito y tú quieres matar a mi primogénito. Es lo que se llama esclavitud dulce: el Faraón mata a los israelitas. Dios dice que si el Faraón mata los primogénitos judíos, Él matará a los primogénitos egipcios.

(2) Hay que entender la primogenitura egipcia. Para el Faraón su primogénito es la certeza de la fuerza divina en su casa y la perpetuidad en el gobierno. Los primogénitos son señal y prueba que la raza, supuestamente divina, sigue. Ataque y muerte del primogénito es borrar una dinastía divina, negación frontal, como recurso último, contra la obstinación de quienes creen en la divinidad del Faraón.

(3) Primogénitos son sinónimos de masculinidad, fuerza, virilidad, descendencia futura. Por eso para los hebreos era tan importante sus primeros hijos, sus primeros frutos y cosechas, para consagrarlos, presentarlos y ofrecerlos a Dios. Una manera de bajar las fuentes del orgullo más típicas de los varones. Algo parecido se hace simbólicamente con la circuncisión, donde no hay entrega pero sí una especie de mutilación vicaria: un modo de hacer ver al hombre que es solo administrador de sus facultades y dones, incluido el sexo.

(4) A los primogénitos hebreos Dios manda que hay que “rescatarlos.” Hay dos tipos de rescate: levitas (reemplazo de todos los primogénitos) y entregar un animal (se reemplaza el primogénito por la ofrenda de un animal). Pero obsérvese que rescatar un hijo quiere decir que yo no soy dueño de mi hijo, sino solo administrador.

(5) ¿Qué significa el “ángel exterminador”? Indica la ira de Dios por la acumulación de nuestros pecados. El pecado de muchos causa al final un efecto horrible.

* La cena Pascual.

(1) El cordero sacrificado se vuelve alimento para el Pueblo. La imagen es de una gran belleza. El cordero se ofrece al Señor y Él nos lo da de nuevo. El cordero pascual es una anticipación de Cristo, Cordero ofrecido a Dios que luego se nos devuelve convertido en Dios mismo, un Alimento redentor y salvador. Un banquete en el que Dios se hace presente.

(2) Comida para el camino. En el ritual de la Pascua, todo apunta a la prisa. El cordero es el que nos pone en camino, es el recordatorio perfecto, es el memorial perpetuo. Hay que comer porque el camino es largo.

(3) El relato de la Pascua se hace porque el niño de la familia lo pide al preguntar por qué esa noche es tan especial.

(4) Cabe ahora preguntarse: ¿qué le faltaba a la Pascua Judía que tuviera que venir la Pascua de Cristo?

Una vida marcada por la Pascua, 03 de 12: Valor permanente del Éxodo

3. Valor permanente del Éxodo

* ¿Por qué el Éxodo marca la historia de Israel? El Éxodo es un relato fundamentalmente teológico. Se trata de la historia de dos dioses, uno verdadero y otro falso. En esa colisión queda demostrado quién es el auténtico Dios. La colisión se convierte, por vía de recuerdo meditado, en un paradigma para futuras ocasiones en que algo pretenda competir con el verdadero Dios. El Éxodo es el arquetipo de las victorias de Dios. No es puro recuerdo que se queda en el pasado sino una realidad, un cimiento al que hemos de volver a él, una y otra vez. Hay un valor permanente en la Historia de la Pascua, y por ello en esa realidad Dios revela su Nombre y su Amor.

* En Éxodo 4, 21-22, Yahveh le dice a Moisés: «Y dirás a Faraón: Así dice Yahveh: Israel es mi hijo, mi primogénito. Yo te he dicho: “Deja ir a mi hijo para que me dé culto,” pero como tú no quieres dejarle partir, mira que yo voy a matar a tu hijo, a tu primogénito.» El Éxodo es la defensa que Dios hace de su hijo. Dios vence y esa victoria es el prototipo de toda victoria.

* ¿Qué fue lo terrible de la esclavitud que sufrían los israelitas? El Faraón trata a los israelitas como si fuesen su ganado o su herramienta; lo suyo no es un maltrato que sería estéril sino un saber usar a los hebreos. Las condiciones externas que los hebreos tuvieron después en el desierto no fueron nada agradables y por eso recordaban con añoranza sus tiempos en Egipto: esto demuestra que su esclavitud no fue de abusos sobre abusos. Una vez que llegaron a la Tierra Prometida estuvieron por dos o tres siglos luchando contra los filisteos, lo cual tampoco fue agradable. Faraón, por el contrario, a pesar de que los menospreciaba y los utilizaba, sabía cómo mantener a sus esclavos felices, según el viejo dicho: pan y circo.

* Así han actuado todos los poderosos emperadores y gobernantes de la humanidad. En la actualidad, los gobiernos socialistas subsidian o ponen dinero en los bolsillos de la gente para hacerlos dependientes. Los subsidios encadenan a la gente, los mantienen atontados y distraídos. En el capitalismo el método es similar pero se encadena a la gente con las adicciones. Hay que mantener la gente adicta con campañas de hiper-sexualización, drogadicción, trabajo, compras, etc. Un adicto es un esclavo feliz. Ejemplo en cambio de los que no han sabido tener esclavos (negros) son los norteamericanos que demasiado a menudo los maltrataron de una manera denigrante.

* Esclavos felices: esta es la fórmula del Faraón. Y entonces, ¿por qué se dice que los hebreos tuvieron una ”dura esclavitud”? No fue así si se compara con la que proporcionaron los romanos o los norteamericanos a los suyos. La razón no es económica ni laboral ni de salud sino la razón de esa “dura esclavitud” es que estaban sirviendo al señor equivocado. Por tanto, la dureza que sufrió el pueblo de Israel no fue de tipo sociológico o estadístico sino teológico. Su sufrimiento es un dato propiamente teológico. Es Dios el que ve que su Pueblo está esclavo y oye su clamor. Es curioso que el mismo esclavo no es capaz de oír lo profundo de su propio clamor. Aquella no era esclavitud sociológica, laboral o económica, como se ve del hecho de que no querían huir: no hay seña alguna de que hubieran intentado rebelarse antes de que Dios le hablara a Moisés.

* El clamor de ellos era el pozo de lágrimas que llevaban dentro y que ni ellos mismos sabían que tenían. El verdadero retiro es llegar hasta el pozo de mis lágrimas. No un llanto viejo, sino el llanto que es nuevo para ti. Los hebreos y todos los hebreos modernos de nuestro tiempo eran y son esclavos “tristemente felices.”

* Por tanto, ¿qué es la Pascua? La Pascua es un despertar, es un darse cuenta: yo, que pensaba que era libre, sin embargo era esclavo; ahora, que sé que soy esclavo, sí puedo llegar a ser libre. Es un descubrir al Dios que sí me ama, a ese Rey al que merece la pena servir. La Pascua es un darse cuenta que este Dios tiene la Victoria. La Pascua del Éxodo tiene un valor permanente porque cada vez que algo o alguien se quiera levantar contra Dios, yo tengo que recordar quién el único Señor y Salvador.

Una vida marcada por la Pascua, 02 de 12: La Pascua de Israel: Dios no se resigna a ser un recuerdo.

2. La Pascua de Israel: Dios no se resigna a ser un recuerdo.

* La liberación de Egipto es el paradigma de las obras de Dios para el Pueblo Elegido. ¿Quién es Dios? Los israelitas responden contando qué ha hecho Dios: la Pascua.

* La Pascua: ¿Qué sucedió?

(1) Contexto cronológico: Abraham (s. XVIII a.C.), la llegada de los hijos de Jacob a Egipto (1700 a.C.), la salida de los israelitas de Egipto (1300 a.C.).

(2) Situación de los israelitas en Egipto.

+ Llegan con necesidad física (hambre) y con una riqueza espiritual (sabiduría de José).

+ Los israelitas se mantienen separados de los egipcios. Durante 400 años crece este pueblo y llega a despertar preocupación en el Faraón. Para cortar el poder de los israelitas, Faraón trata de eliminar los varones y así eliminar la raza (eugenesia).

+ Faraón toma el lugar de Dios (de los dioses según la mentalidad egipcia). Los hebreos después de 400 años tienen demasiado poco de aquello que había ddo y prometido Dios a los patriarcas: quedan algunos ritos aislados y recuerdos tenues, que se disuelven en el pasado; Dios mismo se va volviendo un recuerdo lejano.

+ Dios habla con Moisés para que vaya a hablar al Faraón. En Éxodo 3, 6ss Dios le dice a Moisés: «Yo soy el Dios de tu padre, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob…» Destacamos:

– Dios conoce la realidad de su Pueblo oprimido, que gime.

– Este el Dios que había hablado a sus padres y parecía estar en silencio.

– Las promesas a Abraham están aún vigentes: la Tierra Prometida no es un recuerdo aprisionado en el pasado sino una realidad que llama desde el futuro.

+ Moisés se siente incapaz y se resiste a su vocación (típico de los profetas), pero Dios le da las fuerzas para ir. Moisés le dice a Faraón: «Así dice Yahveh, el Dios de Israel: Deja salir a mi pueblo para que me celebre una fiesta en el desierto.» (Ex. 5, 1).

+ Moisés propone un camino de reencuentro con el Dios verdadero; pero Faraón ve en el Dios hebreo una competencia. Las palabras de Moisés a Faraón le hacen ver que los israelitas están en Egipto pero no son de Egipto. Dios no se resigna a ser un recuerdo, no quiere ser un punto en el pasado, una anécdota en sus vidas. Faraón no reconoce Yavhé y por eso no permite lo que le pide Moisés.

+ Moisés insiste en que:

– Su Dios se les ha aparecido y por lo tanto no es un recuerdo: existe, está vivo, habla y tiene poder para castigar.

– De hecho, llegarán tales castigos (las plagas), que superan al Faraón y su corte, esto es, que le despiertan a su condición de creatura.

– Lo que quiere Moisés es un “retiro de una semana,” que es negado. ¿Por qué? Porque eso supondría apartar a los hebreos de su trabajo. Lo importante para Faraón es que no pare la “máquina,” cuyos son: “producir, consumir y entretenerse.” Es muy importante no parar porque la pausa invita a recordar a Yahvé, y el Faraón no puede soportar que el pueblo recuerde quién es el verdadero Dios: el consumismo exige la esclavitud de la “máquina” y por tanto, la infelicidad. El que está feliz no consume.

– El Faraón no solo no les permite lo que piden sino que además les castiga quitándole ayudas que antes les daba, exigiendo sin embargo el mismo resultado. Les tacha de perezosos. Hoy en día, el crédito es una de las armas del Faraón: que tengas que pagar años y años, y años, y que nunca seas dueño, que nunca te alcance.

– Faraón los tenía contentos a pesar de todo, en el sentido de que Faraón sabía bien la importancia del “entretener” dentro del funcionamiento de la “máquina.” Todo estaba tan bien organizado que la Biblia cuenta que los israelitas al final echaban de menos su Egipto.

+ ¿Cuál es la opresión que se da en Egipto? El tema de la opresión no es solo económico como la Teología de la Liberación intentó presentar. Lo que sucedió en Egipto no era un problema económico. El centro del problema no era la economía sino la religión. El tema central del Éxodo es: quién es Dios. Faraón no quiere tener competencia.

+ El clamor del Pueblo hebreo es el que aún se oye en la gente de nuestro siglo. Un clamor que es oído por Dios. El pecador se vuelve insoportable a sí mismo porque no se sacia, no encuentra paz. El clamor en realidad está en el fondo del corazón. El hombre de nuestro tiempo se llena de cosas pero está vacío; no tiene sentido su vida. Hay que pedirle al Señor que seamos capaces de oír ese clamor. Una sociedad repleta de ruido, de ansia, de consumismo es un sociedad que quiere sepultar ese absurdo. Cuando uno descubre el absurdo o se vuelve a Dios o se precipita en el absurdo y finalmente incluso en el suicidio.

+ Por eso el Faraón no quiere que los hebreos tengan tiempo libre. Sin tiempo para pensar la propia vida y dignidad, y sin tiempo para adorar a Dios, no queda sino trabajar, consumir y entretenerse.

+ Es a través del clamor y del deseo articulado y dirigido hacia Dios como se puede llegar al encuentro personal con Él.

Una vida marcada por la Pascua, 01 de 12: Introducción: Relación entre lo antiguo y lo profundo

1. Introducción: Relación entre lo antiguo y lo profundo

* Origen del retiro es un tema pendiente. Tema rico y amplio que es bueno darle tiempo. Con este tema introductorio se pretende dar una base hermenéutica (interpretación) para explicar el conjunto del retiro.

* ¿Qué es nuestro pasado? Aparentemente es una pregunta abstracta. ¿Distancia? ¿Recuerdo? En la Biblia esta pregunta cobra importancia: la Pascua queda en el pasado. El Pueblo parece que lo que ya pasó pierde importancia. Las nuevas dificultades parece que provoca un olvido del pasado. Nosotros mismos asociamos al pasado los fervores especiales de los comienzos pero pasa y se convierte todo en rutina.

* San Pablo le dijo a Timoteo “acuérdate a Jesucristo”. En el Apocalipsis 3,4 se recomienda en forma de regaño “has olvidado tu primer amor”. En la Eucaristía celebramos una memoria(l) de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor, “haced esto en memoria mía”. Este sacrificio debe permanecer fresco en nuestra memoria.

* La memoria es importante porque sino corremos el peligro que la memoria se nos vaya, el peligro de perderla. Cuando somos conscientes de nuestra historia es difícil que se nos pueda manipular. Sin raíces es fácil que nos manejen.
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LA GRACIA del Viernes 26 de Agosto de 2016

¿Nos estamos preparando para el futuro?, ¿sabemos para dónde va nuestra vida, nuestra familia, la sociedad? ¡Obremos con sensatez! No nos quedemos en el momento presente.

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Historia prodigiosa del Santo Cristo de Totolapan

A unos 125 kilómetros de la ciudad de México, cerca de la Estación Cascada, se halla el pueblo de Totolapan, cuyo primer evangelizador y prior, en 1535, fue fray Jorge de Avila, que edificó casa y convento, y que desde allí evangelizó otros ocho pueblos del actual estado de Morelos. Pues bien, fray Antonio de Roa en 1542 fue nombrado prior de San Guillermo Totolapan, allí precisamente donde aprendió la lengua mexicana, cuando pensaba volverse a España. Tenía entonces 51 años, y su enamoramiento de Cristo Crucificado iba haciéndose cada vez más profundo…

Por aquellos años, apenas llegaban imágenes de España y no había en el lugar todavía quien las hiciese. Y el padre Roa, acostumbrado a orar en Burgos ante aquel famoso cristo de los agustinos, tenía muy vivos deseos de conseguir un hermoso crucifijo, y «lo había pedido muchas veces con devoción y ahínco».

Y un día de 1543, el quinto viernes de Cuaresma, el portero avisa al prior Roa que un indio ha traído un crucifijo para vender. Fray Antonio corre allí, desenvuelve el cristo del lienzo en que el indio lo traía, y sin hacer caso del indio, toma el crucifijo, besa sus pies y su costado, lo venera con emocionadas palabras, y se apresura a colocarlo en la reja del Coro, donde siempre había deseado tenerlo. En seguida llama a los frailes para darles tan buena nueva… Pero cuando trata de dar razón del indio, advierte que ni se ha fijado en él. Corren entonces a la portería, al pueblo, a los caminos, pero del indio nunca más se sabe nada.

En 1583, cuarenta años más tarde, los agustinos lo trasladaron a su gran convento de México, donde esperaban que podría recibir más culto, y para ello, al parecer, lo sacaron de noche y ocultamente por una ventana que todavía se muestra. En 1861, con motivo de la exclaustración decretada por Benito Juárez, los agustinos hubieron de abandonar su grandioso templo de la ciudad de México. Y fue entonces, tras doscientos setenta y ocho años de ausencia, cuando el pueblo de Totolapan consiguió recuperar su santo cristo, y lo trajo cargando desde México. Éste es el origen del Santo Cristo de Totolapan, lleno de majestad y de belleza, tan venerado hasta el día de hoy.


El autor de esta obra es el sacerdote español José Ma. Iraburu, a quien expresamos nuestra gratitud. Aquí la obra se publica íntegra, por entregas. Lo ya publicado puede consultarse aquí.