Qué es ser cristiano, 05 de 16, El Conocimiento de sí en el encuentro con Cristo

[Serie de catequesis para las Monjas Dominicas del Monasterio de la Madre de Dios, en Baeron, Jenchen, Corea del Sur. Cada predicación fue traducida del español al coreano frase por frase, lo cual da un ritmo diferente a esta serie.]

Tema 5 de 16: El Conocimiento de sí en el encuentro con Cristo

* La Biblia nos habla de personas concretas. En aquello que vivieron leemos el actuar de Dios.

* La lectura de la propia vida es el mejor camino del conocimiento de sí. Tomemos como ejemplo al apóstol Pedro.

* En la pesca milagrosa, Pedro se da cuenta que toda su capacidad de experto tiene un límite, y aprende que Cristo es Señor de lo conocido y de lo desconocido. Al encuentro con el Señor, más allá de sí mismo, Pedro se ve a sí mismo.

* En la multiplicación de los panes, no sólo Pedro, sino también los demás apóstoles llegan a verse en su realidad de egoísmo: si despedían a la gente, parece que no era por compasión sino por propia conveniencia, para consumir lo que tenían para sí. El milagro de Cristo revela bondad divina, pero deja también a la luz la mezquindad humana, la de aquellos apóstoles, por lo menos.

* En la transfiguración, Pedro se descubre como capaz de salir de sí mismo. por un instante, su centro no es él, ni lo que le pase a él, sino Cristo, y la sublime belleza de su gloria.

* En la hora de la Cruz, Pedro se descubre incapaz de alcanzar el nivel de sus propias palabras, por más coherentes y generosas que estas sean.

* Es así que el encuentro con Cristo siempre nos remite a una verdad profunda sobre nuestra propia indigencia, con lo cual una puerta se abre, para que el regalo de la gracia divina se haga realidad en nosotros.

Qué es ser cristiano, 04 de 16, Antropología Cristiana básica

[Serie de catequesis para las Monjas Dominicas del Monasterio de la Madre de Dios, en Baeron, Jenchen, Corea del Sur. Cada predicación fue traducida del español al coreano frase por frase, lo cual da un ritmo diferente a esta serie.]

Tema 4 de 16: Antropología Cristiana básica

* La gracia quiere tocar todos los aspectos de nuestra vida. Es fácil parcializarse, concentrándose en un solo aspecto del Evangelio, por ejemplo: la justicia. No todos podemos hacer todo, pero a todos nos tiene que interesar todo en la vida cristiana.

* ¿Cómo hacer un “inventario” de lo que somos y tenemos? San Agustín acude a la imagen de las “potencias” del alma: memoria, inteligencia y voluntad.

* La inteligencia busca la verdad, y es la verdad la que abre el ser a nosotros; es decir, la que nos da poder sobre aquello que es, y también sobre nosotros mismos.

* La voluntad mira hacia el amor. La voluntad es entonces “motor” de la vida. Tanto la inteligencia sin voluntad como la voluntad sin inteligencia dejan en frustración la vida humana.

* La memoria nos conserva en el propio ser. Es una potencia porque las cosas que vamos recordando marca la dirección de lo que vemos y de lo que seremos.

* El mismo Agustín ve una proporción entre esas potencias propias del ser humano y el ser mismo de Dios: nuestra memoria está hecha para atesorar las obras del poder de Dios Padre; nuestra inteligencia ha de buscar la sabiduría de Dios Hijo; nuestra voluntad ha de dejarse colmar de la riqueza y dulzura de amor de Dios Espíritu Santo.

* No llegamos a esa plenitud divina por nuestra propia iniciativa o gusto solamente. Sólo en Cristo-Camino hay camino para llegar al Padre y para ser de verdad hombres y mujeres de espíritu.

Qué es ser cristiano, 03 de 16, La Ley y la Gracia

[Serie de catequesis para las Monjas Dominicas del Monasterio de la Madre de Dios, en Baeron, Jenchen, Corea del Sur. Cada predicación fue traducida del español al coreano frase por frase, lo cual da un ritmo diferente a esta serie.]

Tema 3 de 16: La Ley y la Gracia

* La Ley ayuda a descubrir el pecado, y la Gracia ayuda a vencerlo.

* ¿Cómo sucede que el bien de las creaturas nos aparte del Bien Supremo, que es Dios, de quien toda creatura procede? Es que el pecado es un desorden: le quitamos el primer puesto a Dios, y en su lugar, ponemos algo creado.

* Nuestra voluntad no puede dejar de buscar el bien. También cuando pecamos buscamos un bien pero lo buscamos de manera equivocada. por eso, toda la conversión se reduce al Primer Mandamiento.

* Sobre esta base, entendemos qué es lo propio de la Alianza en la Biblia: no es entre iguales, y por eso su ideal no es el “punto medio.” Cuando Dios libera al pueblo del poder del Faraón, no está resolviendo un problema económico o social: está proclamando que es verdadero Señor.

* La Alianza es el reconocimiento del señorío de Dios. El perdón es entonces un retorno al poder de Aquel que es el único Creador. Es un nuevo comienzo, desde la fidelidad de Dios. Él no cambia ni comienza.

* Empezar de nuevo no es repetir, sino “ser nuevo” otra vez, porque Dios me ha hecho nuevo. No es simple paciencia prolongada, ni simple aguante ante la inexperiencia y la necedad.

* Así entendemos también nuestra infinita necesidad de la gracia. Nada nuestro puede “comprar” un nuevo comienzo: sólo puede llegar a nosotros como regalo, es decir, “por gracia.” Es también ese amor gratuito el que puede hacernos agradables a Dios, que en todo nos supera.

* Dios mismo, Dios eterno, es Don perpetuo, y en ese sentido, Él mismo es Gracia, Gracia Increada. La obra de su Espíritu Increado en nosotros, que somos creaturas, se llama gracia creada.

Motete 017 – Enséñanos a confiar en Ti

Enséñanos a confiar en Ti;
Enséñanos a seguir tu voz,
/ el ritmo de tu paso,
la paz que da tu abrazo:
enséñanos tu senda, Señor. /

Enséñanos a esperar y amar;
enséñanos cómo orar también,
/ el ritmo de los días
que da sabiduría,
enséñanos a vivir de fe. /

Enséñanos a mirar la Cruz;
enséñanos cuál es su verdad
/ el ritmo de la gracia
la paz en la alabanza,
enséñanos tu amor y tu faz. /