V-E. Los bienes de esta tierra

191. La avaricia seca el alma. (Sir 14,9)

192. Hay quien compra mucho con poco dinero, pero luego lo paga siete veces más caro. (Sir 20,12)

193. Difícilmente se libra de falta el negociante, el comerciante no quedará limpio de pecado. (Sir 26,29)

194. Por amor a la ganancia han pecado muchos. (Sir 27,1)

195. Entre dos piedras juntas se planta una estaca, y entre venta y compra se introduce el pecado. (Sir 27,2)

196. Más vale vida de pobre bajo techo de tablas que comida suntuosa en casa de extraños. (Sir 29,22)

197. Feliz el rico que fue hallado intachable, que tras el oro no se fue. ¿Quién es, y le felicitaremos?, pues obró maravillas en su pueblo. ¿Quién sufrió esa prueba y fue hallado perfecto? Será para él motivo de gloria. ¿Quién pudo pecar y no pecó, hacer el mal y no lo hizo? (Sir 31,8-10)

198. Lo primero para vivir es agua, pan, vestido, y casa para abrigarse. (Sir 29,21)