John Henry Newman

Una de las figuras más conocidas y queridas del catolicismo irlandés es la del Cardenal John Henry Newman (1801-1890). El motivo principal es, sin duda, que este hombre, grande por su palabra y sus letras, grande por su virtud y su honestidad intelectual, habiendo nacido anglicano se convirtió a la Iglesia Católica.

Juan Pablo II celebró en su momento el segundo centenario del nacimiento de Newman, y en aquella ocasión escribió una breve carta de congratulación a Mons. Vincent Nichols, arzobispo de Birmingham. Con singular agudeza, el Papa destaca la particularidad de ese siglo XIX en que se desarrolló íntegra la vida de este autor y pastor de almas. En efecto, dice el Papa:

Newman nació en un tiempo agitado, que no sólo sufrió convulsiones políticas y militares, sino también espirituales. Las antiguas certezas se debilitaban, y los creyentes afrontaban, por una parte, la amenaza del racionalismo, y, por otra, la del fideísmo. El racionalismo implicaba un rechazo tanto de la autoridad como de la trascendencia, mientras que el fideísmo alejaba a la gente de los desafíos de la historia y de las tareas de este mundo, produciendo una dependencia deformada de la autoridad y de lo sobrenatural.

El texto completo puede leerse en:
http://www.arvo.net/includes/documento.php?IdDoc=4347&IdSec=725

Hoy quiero referirme a Newman porque con alguna frecuencia cantamos aquí un himno suyo. Transcribo aquí el texto, y luego me aventuro a proponer una traducción:

Lead, Kindly Light, amid the encircling gloom
Lead Thou me on!
The night is dark, and I far from home�
Lead Thou me on!
Keep Thou my feet; I do not ask to see
The distant scene�one step enough for me.

ever thus, nor pray’d that Thou
Shouldst lead me on.
I loved to choose and see my path, but now
Lead Thou me on!
I loved the garish day, and, spite of fears,
Pride ruled my will: remember not past years.

So long Thy power hath blest me, sure it still
Will lead me on,
O’er moor and fen, o’er crag and torrent, till
The night is gone;
And with the morn those angel faces smile
Which I have loved long since, and lost awhile.

Traducción propuesta:

Guía, Amable Luz, a través de la penumbra,
¡Guíame Tú!
La noche es oscura, estoy lejos de casa;
¡Guíame Tú!
Cuida mis pies; no pido ver
el horizonte a lo lejos –me basta un paso.

empre como ahora; no acostumbraba pedirte
que me guiaras;
siempre quise elegir y ver mi camino, pero ahora
¡Guíame Tú!
Amé los días relumbrantes, y por encima del miedo
el orgullo me podía: no recuerdes esos años.

Desde lejos tu poder me bendecía; de seguro
podrá guiarme ahora
por rastrojos y malezas, por pendientes y quebradas, hasta
que cese la noche.
Con la mañana sonríen aquellos Angeles
que yo había amado de lejos y que un tiempo había perdido.

***

Hay una biografía del Card. Newman en:
http://www.aciprensa.com/vejemplares/newman.htm