Cómo es Dublín

Dublín es una ciudad de contrastes y de gran movimiento. Tiene dos grandes zonas históricas, amén de amplios barrios residenciales y zonas verdes. Hacia el sur, hay todo un polo de vida y desarrollo en los alrededores de la calle Grafton; un poco más la norte, el gran eje que forma la calle O’Connell, actualmente en proceso de remodelación y embellecimiento urbano.

Grafton Street parte del Trinity College, fundado en 1751. Este college impresiona desde el primer momento por su austeridad y ritmo clásico. El tesoro más preciado de este College, que es un centro académico vivo, es el Libro de Kells, un antiguo manuscrito de los monjes que habitaron esta región hacia el siglo X.

La zona comercial gira en torno a Grafton Street. En sus alrededores se encuentran los jardines de St Stephen’s Green y la Leinster House, sede del Parlamento irlandés. Cerca está el Museo Nacional, con recuerdos de la antigüedad irlandesa.

No lejos de allí encontramos el castillo de Dublín, que no trae buenos recuerdos para los irlandeses. Es la señal de los tiempos de dominio de los ingleses.

La verdad es que Irlanda ha padecido múltiples invasiones: celtas, vikingos, normandos e ingleses han dejado su huella, parte de su herencia cultural y algo del alma templada a fuego de este país que si algo lleva en sus entrañas es un anhelo infinito de independencia.

Las invasiones no sólo tuvieron sólo un carácter económico o político sino también lo religioso: los presbiterianos y anglicanos, venidos de Escocia e Inglaterra respectivamente tomaron los templos católicos y prácticamente prohibieron muchas manifestaciones de nuestra fe. Como testimonio de aquella a´poca y como lugar de culto actual quedan la Christ Church Cathedral, construida originalmente en 1190 por el barón normando Richard Clare S. y la St. Patrick’s Cathedral, fundada en 1172 y llena de recuerdos del escritor Jonathan Swift. Esta última, a pesar de su nombre, no es católica sino de la “Iglesia de Irlanda”, que es como la versión irlandesa de los anglicanos.

Uno de los lugares más visitados de Dublín es la fábrica Guinness, la mayor exportadora de cerveza del mundo. Ella da su aire particular a una zona muy animada de la ciudad.

Al noroccidente de las grandes instalaciones de la Guinness está el Phoenix Park, uno de los mayores parques urbanos del mundo. Un lugar para embriagarse… de verde y de naturaleza. En es fácil ver grupos de familias, equipos de fútbol gaélico, criquet, polo o ciclistas afcionados o profesionales.

Bueno, con la bondad de Dios, les seguiré compartiendo impresiones y reflexiones. Gracias por su tiempo y oraciones, mis amigos.